La naturaleza, fuente inagotable de energía

Hoy, como cada 1 de agosto, mucha gente honra a la Madre Tierra con rituales ancestrales, mientras que otros tantos anuncian en las redes sociales que ya cumplieron con la tradición de tomar caña con ruda, sintiendo que así la misión de rendirle tributo a la Pachamama y ahuyentar la mala onda está cumplida… Nunca es bueno generalizar, por eso hay que respetar a quienes realmente adoran a la naturaleza, viviendo de forma tal que sus acciones cotidianas generen el menor daño posible en el medio ambiente.

Aquellos que valoran genuinamente al entorno que los rodea y están agradecidos por tanta perfección natural no conducen automóviles por la playa como suele ocurrir en San Bernardo (y este martes tan especial, desafortunadamente, no ha sido la excepción), no extraen almejas cuando saben que se trata de una práctica prohibida ni dejan residuos fuera de los lugares habilitados para tal fin.

Si uno analiza por estas horas los comentarios dejados en artículos periodísticos y las publicaciones más recientes de Facebook o Twitter parecería que la humanidad en su conjunto venera a la Tierra y la protege de cualquier mal, pero en la vida real muchas especies resultan perjudicadas y destruidas por el accionar humano… No debería haber hipocresía pero sí respeto y cuidado por las maravillas de este planeta, algunas de las cuales hemos retratado este mediodía para compartir con ustedes cómo transcurre en San Bernardo este primer día de agosto de 2017 y demostrar la hermosa energía que acumula y genera el paisaje costero.