Lamentablemente, los miembros de esta agrupación sufrieron el fin de semana pasado un episodio que ellos decidieron hacer público en redes sociales porque no tiene que volver a repetirse. Según su testimonio, una persona empezó a gritarles en el espacio público donde ellos practicaban coreografías porque le molestaba “el ruido” que estaban haciendo. También, de acuerdo a la publicación difundida en las últimas horas, la mujer llegó a “samarrear” a uno de los murgueros y pateó uno de los instrumentos.
Es extraño tener que aclarar que este tipo de actos no se deben tolerar ni permitir. En caso de algún disturbio, siempre se tiene que acudir a las fuerzas de seguridad, llamando a la policía o solicitándole ayuda a quienes forman parte del equipo de ordenamiento urbano.