La sal de la vida

Contemplación canina de la inmensidad

Para quienes nos gusta el mar, el frío no constituye un obstáculo a la hora de acercarnos a la playa. Con bastante abrigo y durante las horas en las cuales el sol brilla con intensidad, caminar por la arena sigue siendo un placer aún en invierno.

Hoy, después del mediodía, la cámara de San Bernardo Info tuvo el privilegio de capturar un instante mágico, donde el paisaje y la vida se fusionó de manera perfecta para dejarnos ser testigos de una gran obra de arte natural.

Uno de los perros callejeros que suele recorrer la zona céntrica de San Bernardo en busca de mimos y algo de comida; las olas; y, en el fondo, numerosas gaviotas, hacen de esta imagen una postal perfecta que, de ser una pintura, podría ser bautizada como “La sal de la vida”.

Y ya que el mar nos invita a pensar en la sal y ella, en un gran artista argentino que lleva años “pintando” sonrisas en personas de distintas generaciones, en esta oportunidad vamos a recordar desde este espacio al querido Carlitos Balá. Este hombre que jamás se cansa de preguntar “¿Qué gusto tiene la sal?” está cumpliendo 89 años de vida. En su honor, desde esta ciudad costera respondemos que, cada vez que una ola nos revuelca y nos lleva a tragar algo de agua, no nos quedan dudas de que el gusto de la sal es… ¡salado!

¡Hacé click en la foto para verla más grande!