La Madre Tierra merece cuidado todo el año

Ayer, mucha gente cumplió la tradición de empezar agosto tomando caña con ruda. También se difundieron muchos mensajes a favor de la Pachamama, resaltando el respeto que merece nuestra Madre Tierra. Lástima que, un día después, el mensaje positivo a favor de la ecología pierde valor al observar la realidad que nos rodea.

Basura en la playa

Hoy es un sábado con mucha humedad en San Bernardo. El sol intentó salir después de una breve llovizna pero minutos más tarde el cielo volvió a cubrirse y el ambiente aún permanece gris y la niebla domina el paisaje. Sin embargo, en horas del mediodía nos acercamos a la playa a tomar nuestra clásica fotografía diaria y advertimos que, incluso con una visibilidad escasa, la naturaleza nos mostraba mucha suciedad arrastrada por el mar.

De nada sirve adornar nuestro vocabulario una vez por año y estar “a la moda” con discursos ecologistas si no acompañamos las palabras con acciones. Desde el lugar de cada uno podemos evitar la contaminación: el mejor regalo que se le puede hacer a la Madre Tierra es no dejar botellas sobre la arena, guardar en nuestro bolsillo envoltorios hasta encontrar un cesto de residuos y tener conciencia y respeto por el medio ambiente cualquiera sea el lugar donde nos encontremos.

Cuidar siempre el entorno natural con gestos simples y enseñarle a nuestros hijos a valorar y proteger la naturaleza es la mejor forma de rendirle un homenaje coherente y duradero a la Pachamama.

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