Jugar en la arena, felicidad plena

El paso de los años cambia muchas cosas, pero hay algunas que permanecen inalterables. Hoy podremos tener celulares con conexión a Internet, cien canales en la tele y dos mil canciones en el MP3… y sin embargo hay actividades simples que nos siguen llenando el alma.

Diversión que no pasa de moda

Nuestra postal de este martes 18 de noviembre podría haber sido tomada hace cinco, diez o veinte años: por suerte en ningún momento se perdió la felicidad que se experimenta en la infancia cuando se juega en la arena. Una palita, un auto de plástico, una pelota o simplemente las manos alcanzan para pasar tardes inolvidables a orillas del mar.

Se acerca un nuevo fin de semana largo y, si el tiempo acompaña, el ritual se repetirá en San Bernardo: muchas familias se acercarán a la playa para que los más pequeños se diviertan. Y si no es ahora, será en las vacaciones que están a la vuelta de la esquina. Lo importante es que, siempre que sea posible, los chicos tengan la oportunidad de divertirse sanamente al aire libre, supervisados por los adultos y protegidos contra el sol.

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