Un día como hoy, pero hace setenta años, nacía
San Bernardo del Tuyú. El
4 de enero de 1944,
Juan Carlos Chiozza y sus socios fundaron una localidad que, con el tiempo, se convertiría en uno de los principales destinos turísticos del país.
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Distintas etapas y lugares de Sanber |
Estos emprendedores crearon la
Compañía Inmobiliaria del Este Argentino S.R.L. y compraron 191 hectáreas que formaban parte de la
Estancia San Bernardo, perteneciente a la familia
Duhau. Uno de los primeros desarrollos fue un mercado ubicado en la actual calle
Chiozza entre
Strobel y De La Reducción, construido en altura para evitar problemas cuando el mar creciera. Aunque ese mercado ya no existe, la
Vereda Alta sigue siendo un símbolo de
San Bernardo.
La
Plaza del Sol y la Familia, donde se lleva a cabo la ya tradicional fiesta nacional que marca el comienzo de la
temporada de verano en el
Partido de La Costa; las galerías comerciales de
Chiozza; la gruta de la
Plaza San Juan Bosco; la capilla
Stella Maris; y, por supuesto, la playa también se convirtieron en emblemas de un pueblo que nació hace siete décadas y que nunca dejó de crecer.
A celebrar, entonces, los
70 años de esta ciudad que muchos elegimos para vivir y otros tantos para pasar sus vacaciones. ¡Feliz Cumple,
San Bernardo querido!
¡Hacé click en la foto para verla más grande!
Me sumo al saludo de felicitación por estos primeros 70 años de vida de nuestro San Bernardo querido.
ResponderEliminarAhora, la de cal (o arena, nunca supe bien cuál): durante el mes de diciembre, y con mayor énfasis en sus últimos días, estuve buscando sin cesar información sobre el 70° aniversario de San Bernardo, y apenas fue mencionado de manera imprecisa en una nota sobre un reportaje radial que le hicieron a una persona, de la cual no recuerdo su nombre ni el medio que la hizo. Desistí de mi búsqueda ante las prácticamente nulas referencias.
Tiempo después de la fecha de aniversario, aparecen como mínimo 5 links que hablan de esto, uno de ellos es éste. En otro sitio web de noticias del partido de La Costa se explica cómo fue la "celebración" de este aniversario, que es digno de mi respeto hacia las personas que participaron con su buena voluntad, pero que muestra a las claras que no es una ciudad que "nunca dejó de crecer", como decía un testimonio, sino que año tras año puede verse el desinterés de los responsables de gestión del municipio para con el mantenimiento, la renovación edilicia y paisajística y la promoción turística de la ciudad. Esa "reunioncita" que tuvo lugar en el nuevo Centro Cultural de San Bernardo es lo más "triste" que imaginé que podía ocurrir, por la pobreza de contenido y lo intrascendente del hecho. Reitero mi admiración a las personas que fueron al lugar con la mejor predisposición, pero no pueden decir que esa conmemoración estuvo a la altura de lo que se supone que merece una ciudad como San Bernardo. Sinceramente fue algo muy "triste", en el sentido de la poca convocatoria que tuvo (falta de promoción mediante) y en lo formal que fue el acto, casi como para figurar o para justificar la existencia del Centro Cultural.
Evidentemente, los años que tuvieron para transformar la ciudad en un destino turístico ocasional de renombre o de residencia permanente fueron desaprovechados, al dar por supuesto que San Bernardo es un lugar muy concurrido (fundamentalmente por jóvenes que gustan de la "movida nocturna"), y que no necesita nada más que un par de boliches para que la actividad turística esté asegurada verano tras verano. Lo que no se percataron estos muchachos, es que lo único que ofrece San Bernardo, desde hace varios años, es solamente eso, decepcionando así al resto de su target, que históricamente fue la familia, para dar lugar a entretenimientos de dudosa calidad y gusto dirigido únicamente a "los pibes".
Viendo que esta situación viene profundizándose año tras año, he decidido no planificar este verano mis vacaciones en esta ciudad. No sé si la vida me terminará depositando en San Bernardo, pero desde ya, estoy buscando otros lugares para vacacionar, en lugares que quieran tener turistas emprendedores, capaces de entregar y recibir experiencias que fueron vividas durante el año anterior, y no sólo prenderse en la locura bolichera que tanto perjudicó al ambiente sanbernardino.
San Bernardo no es un destino turístico que se promociona solo; es necesario que le ofrezca al visitante mayores opciones y un amplio abanico de posibilidades para disfrutar, aunque sea el sólo hecho de no ver basura por todos lados y veredas rotas por doquier, como se ve todos los años. Y ni que hablar de las playas, si es que a esa franja de arena que entra en un baldecito se le puede llamar así...
Una lástima que San Bernardo esté transitando su "tercera edad" como un trapo viejo y no de manera jovial, reluciente y con ganas de progresar, con aquella ilusión que tienen todos nuestros adultos mayores de vivir sus últimos años de la mejor manera posible. ¿En qué estado estará San Bernardo dentro de 10 años? Ojalá no estemos lamentando su olvido, su muerte...
Martín Federico Sekunda